En el deporte de alto rendimiento habitualmente la meta es ser mejor que el otro, el éxito y el fracaso se miden en función de cómo se haya quedado en la clasificación, de si se ha ganado o se ha perdido. Esto es algo normal en el deporte de competición (y cada vez más en el amateur), aunque puede tener consecuencias no deseadas.

Cuando nuestro único objetivo depende de lo que hagan los demás, nuestra satisfacción y bienestar ya no depende de lo que hagamos nosotros, la percepción de control disminuye, y la probabilidad de que sintamos presión añadida aumenta, haciéndolo también los abandonos, especialmente cuando se está acostumbrado a ganar y de repente no se está entre los mejores.

Para compensar esta situación, en psicología deportiva, se recomienda ponerse metas que dependan de uno mismo, que se dirijan a la superación personal. De esta forma, hayamos ganado o perdido, siempre tendremos una segunda «vara de medir», basada en nuestra propia evolución, donde sí tenemos mucho que decir y hacer al respecto.

A continuación veremos 7 elementos que van a fomentar la superación personal, ¡presta atención!:

COMPROMISO

Compromiso en la persecución de tu sueño, de ser lo mejor que puedas, desarrollándote de una manera integral, técnica, física y mentalmente. Fíjate metas claras y no desistas aunque te encuentres obstáculos, y ante aquellos que te parezcan insuperables, sé creativo y busca caminos diferentes para conseguirlo. Aprende de manera constante y disfruta con lo que haces.

ATENCIÓN DIRIGIDA

Céntrate en el momento, en el lugar, en tu desempeño, en lo que experimentas. Cuando permites que se encienda «el piloto automático», las cosas suceden de manera natural.

CONFIANZA

Confía en tu propio potencial, en tu capacidad para superar obstáculos y lograr tus objetivos. Confía en tu preparación para saberte capaz de conseguirlo. Confía en la relevancia de tu misión, en tus elecciones y confía en aquellos con los que trabajas.

IMAGINACIÓN O VISUALIZACIÓN POSITIVA

Piensa y visualiza que lo mejor puede pasar. Proyecta lo que quieres conseguir día a día, mejora tus habilidades para acelerar el proceso de aprendizaje.

PREPARACIÓN MENTAL

Crea oportunidades de aprendizaje y aprovecha los errores para aprender de ellos, sigue un camino que saque lo mejor que hay en ti. Relájate y sé capaz de centrarte en otros ámbitos, además del profesional.

CONTROL DE LA DISTRACCIÓN

Cuando te distraigas, recupera la concentración, pon foco en lo que estás haciendo. No prestes atención a aquello que te aleje de tus objetivos, de tu superación y mejora personal.

APRENDIZAJE CONSTANTE

Reconoce lo que puedes mejorar o perfeccionar. Evalúa tu actuación y sé consciente de tus progresos. Extrae lecciones importantes de cada experiencia o actuación. No olvides poner en práctica aquello que aprendas.

Y tú ¿qué importancia le das a superarte? Estás a tiempo de plantearte metas que dependan de ti mismo.